de Iván Hernández, recomendables para aquellos que gustan de la space opera ligera, sin más pretensiones que la historia, y muy divertida.
Ya he leído otras cosas de este autor y todas me han gustado bastante. Creo recordar que había una que no demasiado, pero dada su productividad no es un mal baremo.
Estas pequeñas novelas son muy rápidas y están muy bien escritas. Extrañamente no puedo dejar de pensar en ellas como si fuesen obras de teatro. Y quizás es por eso por lo que me gustan tanto.
Acabo de comprar -y leer, todo en el día- la tercera entrega y estoy deseando que lleguen las siguientes. Es más, me gustaría mucho tenerlas todas en un volumen en papel, pero supongo que eso tardará en llegar.