… o casi. Algo que me ha hecho preguntarme: ¿ cómo han llegado a ese acuerdo ?
El sábado mi hija Laura fue con su amiga Lucía a un centro comercial de los de por aquí. Uno de esos inmensos donde encontrar siempre lo mismo, pero como para ella era la primera vez que iba de compras con una amiga le pareció lleno de oportunidades.
A la vuelta me enseñaron dos collares que se habían comprado, con un corazón muy moña colgando, y me pidieron que les quitase un pequeño corazoncito extra que llevaban incorporado. En ese corazón estaban las iniciales BPF (el acrónimo de Best Friends Forever) y al parecer no era el caso.
¿ Ah, no ? Pues no; según me dijo Laura en un aparte quería mucho a Lucía pero no era su mejor amiga; por lo visto es … bueno, quien sea, porque se me olvidan los nombres, pero que no era conveniente que llevasen ese añadido.
Más tarde habló con su madre por teléfono y escuché cómo se lo repetía. Me pareció entender que decía que ambas lo habían considerado adecuado. Y ahí surgió mi duda: ¿ cómo habían llegado a ese acuerdo sin resultar dañadas o molestas ?
No he querido indagar más, lo dejaré para más adelante, pero no voy a olvidarlo. ¿ Fue una de las dos la que llevó la iniciativa ? ¿ Cómo lo planteó a la otra parte ? Y la otra, ¿ aceptó de buena gana, aliviada en el fondo, o claudicó visto que tenía las de perder ?
Preguntas, preguntas, …