… ante la avalancha de tareas pendientes.
Esta mañana he estado revisando las cosas en las que estoy metido en las muchas facetas de mi puesto de trabajo y, chico, son demasiadas hasta para tres personas.
¿ Tantas, dirás ? Pues no, no tantas, es más bien lo complejas que suelen ser algunas. Una tarea como ocuparse de las copias de seguridad es un mundo en sí. ¿ Qué significa ? ¿ Qué abarca ? ¿ Cómo se realiza ?
Pues así con la mayoría. Y ya te digo que así ni hago ni deshago. Pero es que si me pongo a descomponer la tarea no es que me salgan varias, es que aparece una profesión al completo. Y no, ni la empresa tiene los recursos para afrontarlo -y no se le puede decir, ya me he dado cuenta- ni yo puedo cargar con algo así porque luego las responsabilidades son todas. Como no se han especificado antes pues asumimos que son todas las que aparezcan.
Un ejemplo es un correo que el director envió al programador externo que se ocupa de nuestro ERP (el que malfunciona con odoo) el pasado viernes. Es una lista de los asuntos que están abiertos con él y sus prioridades, con la advertencia de que no se autoriza ningún desarrollo nuevo hasta que no estén completadas.
La primera en la lista reza así: Velocidad de la base de datos. Y la respuesta del muchacho externo ha sido: Ya he realizado los reinicios adecuados. Necesito feedback de todos.
¿ Cuál era el problema ? No se sabe. Sólo se ha percibido que hay ocasiones en las que todas las respuestas de la aplicación se ralentizan hasta el punto de dejar el sistema inoperante. ¿ Frecuencia, duración, entorno ? A veces, un rato largo y no hacemos nada raro.
Es decir, ellos se quejan con razón de que el sistema les deja más bien tirados en ciertas ocasiones. Que no saben qué lo provoca ni les importa más allá de que no pueden trabajar.
La respuesta que cito antes es correcta pero completamente inútil. Sabe que el problema aparecerá una y otra y otra vez y que reiniciando parece que se arregla. Digo parece porque no está actuando en el momento del problema. Actúa después, tras verse informado y cuando se pone a ello.
¿ Es culpable ? ¿ Es malvado, negligente ? No. Creo que no. A mi entender tiene parte de la culpa por no exigir formalismos (requisitos en proyectos nuevos, mecanismos de seguimiento de errores, …), pero es que nadie se lo planteó y en el fondo le conviene. Hace y deshace a su ritmo, tiene trabajo asegurado y cobra regularmente. ¿ Por qué cambiar ?
En el caso que menciono se debería partir de alguna métrica, ¿ verdad ? Tenerlas es valioso para saber cuál es el problema real pero nadie le ha pagado por hacerlas así que, que yo sepa, no hay. Él sabe que serían de mucha ayuda para futuros trabajos con nosotros pero pensará que no merece la pena dada la baja frecuencia del error.
Es la empresa la que está desbordada porque no tiene forma de seguirle el ritmo. El último mensaje era una petición de fechas de finalización de tareas y ya veremos qué responde y cuándo, porque incluso hacer algo así, estimar la duración, le lleva un tiempo que a lo mejor no tiene.
Y ahora entro yo. ¿ Cómo consigo plantearles mi idea ? Tengo que ser sutil (no quiero decirles que necesito que se apoyen y confíen en mí, aunque sea así) y certero (no puedo dejar espacio para las dudas). También debo tener hechas las disposiciones necesarias para no venderles humo. Que vean que tengo seguridad y que les voy a quitar trabajo, no a dárselo.
Llevo toda la mañana pensando en ello y creo que tengo más o menos un plan de actuación. Tiene algunos flecos pero la parte más importante es la exposición a los jefes. No puedo ni darle mucha importancia porque dirán que es mucho lío aunque ellos no intervengan, ni rebajarlo porque entonces cualquier petición de recursos posterior no se tendría en cuenta.
Planes, planes y planes. Antes de estar excluido era todo más fácil.