A comienzos de año los componentes de mi grupo de teatro con Susana Merino comenzaron a descolgarse uno a uno hasta que, muy poco después, quedamos sólo tres y eso era insuficiente para mantenernos y mantener a una profesora. El grupo, pues, se disolvió.

Estuve buscando un grupo de teatro por el pueblo porque algo me sonaba y conseguí encontrar uno que llevaba funcionando varios años: grupo teatral Carmen Martín Gaite. Descubrí que el ayuntamiento no lo publicitaba directamente; lo incluía en un PDF con todas las actividades culturales que no se me ocurrió consultar. El caso es que me uní a ellos y la cosa empezó a ir muy, muy rápido.

Tanto que durante 2023 actué en tres representaciones de la obra El Ascensor e incluso participé en la creación de una asociación cultural dedicada al teatro llamada Bóvalo, llamada así por ser uno de los nombres primitivos del pueblo de El Boalo.

Aunque sólo actuaba en una única escena estuve muy implicado en la parte de organización y montaje de escenarios y llegué a amar y odiar al mismo tiempo al atrezo de la obra.

Las representaciones fueron:

• El 6 de mayo en el centro cultural de Cerceda
• El 14 de mayo en el teatro Montalvo de Cercedilla
• El 22 de mayo en la prisión de Soto del Real.