No me ha llevado mucho tiempo aunque sí que he sufrido algunas dificultades con el taladrado de la encimera. Una vez introducidas las tuercas de ensamblar todo ha sido mucho más fácil.
He colocado un trozo de goma entre la encimera y el tornillo. No creo que vaya a protegerla mucho más, es sólo que necesito delimitar mentalmente las zonas y esto ayuda.
Los tornillos eran demasiado largos y ante la disyuntiva de cortarlos me he apañado con una tuerca y una arandela. No han quedado nada mal.