Unos tanto …

… y otros tan poco. No, no me refiero al pelo, sino a modems USB 3G del fabricante Huawei.

Y digo tan poco porque justamente ahora que acabo de contratar un plan de acceso a la red 3G voy y me encuentro con un módem Huawei E1612, donado desinteresadamente por su antiguo propietario, que contrató un plan de datos que después canceló.

Yo por mi parte lo guardaba con el mismo celo con el que guardo otras cosas, hasta que me he encontrado con un artículo del blog Ubuntizando el planeta de Miguel Parada, en el que cuenta cómo liberar los modems fácilmente.

Se necesita primero un código de desbloqueo que se consigue de una forma opaca y un tanto extraña. Con el número IMEI del dispositivo (que suele estar bajo la tapa que da acceso al SIM) se visita una página web que nos devuelve el citado código. Luego empleamos una aplicación tan común como

minicom

para comunicarnos con el trasto y enviarle la orden

AT^CARDLOCK=XXXXX

y ya está.

Bueno, ya está presuntamente porque lo cierto es que no tengo un SIM de otra compañía que no sea la telefónica para poder probarlo.