… al menos si es elegancia lo que buscan.
Hace once meses fotografié una especie de escultura gigante de un bebé y puse una entrada en estas páginas con un breve comentario. Hoy he vuelto a pasar por delante, camino del taller de automóviles, y me ha vuelto a sorprender.
Sí. Lo han pintado de color dorado. Y se han quedado tan panchos. Al menos les han comprado una grúa con muy buena pinta, pero lo mismo no compensa por tener que ver esa cosa todas las mañanas al entrar a trabajar.