Esta obra se representó en el teatro de Tres Cantos y es una adaptación de la obra teatral Yerma, de Federico García Lorca, escrita y dirigida por Susana Merino y su grupo de teatro avanzado. Fuimos a verla Laura y yo.
¿Qué decir de ella? Pues que es una pequeña maravilla. La dirección de Susana se notó un montón. Consiguió plantearlo en dos líneas temporales. La de Yerma y la actual y transmitió justamente lo que pretendía Lorca, al menos en mi opinión.
En la línea temporal actual incluso presentó algunas escenas cómicas que no dejaban de lado la temática pero resultaban un pequeño alivio en el escenario al que dirigía la línea temporal de Yerma. Es una historia terrible y termina así, sin espacio para la risa y sí para la reflexión. Reflexión ésta que a mí me duró un suspiro porque, sinceramente, estoy muy cansado de tanto sufrimiento innecesario pero inevitable tal y como vivimos. A Laura también le gustó mucho la puesta en escena. Todas las actrices, y un actor, permanentemente sobre las tablas y al mismo tiempo invisibles si no tenían que aparecer.
Se puede encontrar más información e imágenes en la web de Susana.