… al menos para ellas. Esta tarde he fotografiado este ejemplar sobre la pared de la cocina. Una preciosidad sin duda.
Lo que lamento es no haber podido emplear la cámara Panasonic Lumix; he tenido que conformarme con la de mi pareja, que es mucho más aparatosa y «profesional» pero que para obtener primeros planos de objetos de menos de un centímetro no le cojo el truco. Y eso me recuerda que debería quizás poner algo como escala junto al bicho que quiero fotografiar. Quizás un bolígrafo me vendría bien, pero lo mejor sería emplear una de esas reglas que he visto en las series de investigación forense.