… porque mira que es invasivo el sistema, pero se extiende como un virus.
Y no es quejarme por quejarme, es que veo que cada vez más y más de los contactos que tenía en la agenda empiezan a aparecer como disponibles en el programa y no me lo termino de creer. En otros sistemas de mensajería instantánea al menos tenías que hacer algo para que esas personas pudiesen comunicarte contigo; enviarles una invitación, agregarles, inscribirles en algún sitio. Con esto basta con estar en su libreta de direcciones para que puedan irrumpir en tu vida sin más anuncio ni presentación. Jo.
No me extraña, viendo lo bien que funciona el programa, que empresas como «telefónica» se descuelguen ahora con ofertas como los SMS gratis si contratas un plan de datos. ¡ Nos ha jodido Mayo ! Si tengo plan de datos ¿ para qué quiero enviar SMS ? Ah, sí, para aquellos que aún no tengan plan de datos.
Bueno, vale, pero eso no quita para que el «uasap» no sea un tostón que mantengo porque mi pareja quiere que lo haga. Además, empieza a usarse tan mal como otros sistemas de comunicación humanos: hoy he recibido mi primera carta en cadena de alguien a quién no tenía en la agenda por haber cambiado de teléfono hace unos meses. Pues qué bien, si eso ha ocurrido ya podemos decir que el medio está maduro, ¿ no ?
Pues… yo misma. Quiero decir que no uso el «uasap» de las narices, entre otras cosas porque mi teléfono es el más básico de la gama, tiene cámara porque no me quedaba más remedio pero no tiene nada más. En su momento acaricié la idea de pillarme un iPhone, pero me compensa más un iPad para mí solita, sobre todo porque de precio van más o menos igual y sólo de pensar en que me roben el bolso con el iPhone dentro me dan los siete males (el iPad lo sacaría sólo en viajes, y gracias).
De todas formas, me temo que a mí la moda esta de la mensajería instantánea, twitters y demás zarandajas me ha pillado tarde. Sigo sin verle el atractivo a saber en qué momento y dónde está cenando tal amigo, o haciendo pesas, o lo que sea. Y tampoco me apetece ir divulgando esa información a mis amigos, aunque sólo sea porque a ellos no creo que les interese. Así que no, no tengo tarifa de datos ni móvil inteligente, y me tendrás que seguir mandando SMS cuando estés en la puerta de la oficina :)
@Anghara : Tendría que haberte citado a ti como excepción a mi lamento, mis disculpas. :-)