Adivine usted dónde y con qué me estrellaré próximamente

Porque de todo hay, oiga, y bien barato.

Llevo varias semanas ya dándole vueltas a cómo coger una rutina similar al trabajo pagado que me dé diversión, provecho y unos hábitos cuquis. Me hace mucha falta porque esta sensación de igualdad entre un martes y un sábado me está perjudicando mucho.

Al principio me he puesto a mirar qué cosas de mis redes podría arreglar (muchas) y cómo podría hacerlo (mal, que ya tengo experiencia con esos arreglos temporales) y me hice una lista en papel con buena letra y mejor distribución. Y sí, está muy bien tener una lista así pero… Siempre hay un pero. Esa lista ignora que muchas de las cosas están relacionadas entre sí y al final lo que tengo es un grafo de dependencias donde no consigo situar ningún comienzo.

Es más, las dependencias llegan a ser circulares y ahí sí que me pueden ahora. Si, por ejemplo, quiero migrar el wiki gestionado por Mediawiki a algo más sencillo como mkdocs me encuentro con que primero tengo que poner en marcha el wiki porque está hecho unos zorros y así poder sacar su contenido. Y si está hecho unos zorros es porque no ha tenido mantenimiento últimamente porque lo consideraba condenado a morir en breve; cuando lo migrase a mkdocs. Vale, pues entonces lo pongo en marcha y le peino y le lavo y entonces me doy cuenta de que ¡ ya está arreglado y puedo usarlo ! ¿ Para qué migrarlo ? Ya no recuerdo. Pero como todo ésto está en mi memoria y tengo al cerebro en modo berseker con el bucle ni arranco ni abandono la idea.

Tengo que ser más pragmático aún. Lo pongo en marcha (el wiki), lo uso por lo valioso que sigue siendo, y apunto la migración a una era donde pueda afrontarlo sin entrar en crisis tipo bichobola que ya me voy conociendo.

Con la terapeuta he llegado a tener un plan que me ayude a adquirir una estructura de vida, que la que tengo ahora no va a ninguna parte. Este plan contiene en definir cuatro áreas iniciales que intentar cumplir todos los días laborales hasta que sea tan sencillo hacerlas que no piense en ellas:

  • Arranque: esta fase incluye el despertar, el desayuno, el aseo y el paseo bicheríl. No es algo que no haga pero en algunas de ellas me diluyo y se me va el vino en catas. Dos horas de mirar artículos técnicos puede estar bien ocasionalmente. Todos los días no.
  • Trabajo: esta fase consiste en hacer cosas referentes a mi profesión o similares. No importa cuánto le dedique ni lo que haga pero tengo que conseguir la satisfacción de haber hecho algo.
  • Manual: Sí, trabajo manual, que abarca tanto manualidades ociosas y divertidas como tareas domésticas que no lo son tanto. El control sobre el entorno me hace mucha falta. Basta con la sensación de control, ojo.
  • Leer: ¡Pero si ya lees todos los días!- me dices con tus ojitos de cervatillo. Pues sí, pero leer cosas que me hagan pensar, no una saga policial de seis tomos de las que no recuerdas ni el nombre de la protagonista y menos aún del malo. Y tengo mucho que leer de ese tipo. Cosas interesantes, didácticas, chocantes y complejas. Poco a poco pero algo todos estos días.

La parte que más me interesa ampliar con el menor sufrimiento posible es la fase de trabajo. Quiero empezar a hacer varias cosas, especialmente sobre programación, con algún viso de resultado a corto plazo. No estoy para construir catedrales, más bien pequeñas chozas en el borde de un lago. Pero también aquí tengo que forzarme de alguna manera hasta que consiga arrancar. Y he estado buscando cosas en la red que me empujasen en cierto modo y he aquí lo que he encontrado.

  • Cursos: pequeños y lo más especializados posible. Remotos y sin presiones ni exámenes. Como inicio.
  • Desafíos: comprometerte a hacer cosas que hacer durante un periodo finito de días (100 principalmente) y que anunciar a los demás como medio de presión.
    • 100DaysOfCode: consiste en programar una hora mínimo al día y durante cien días y publicarlo con una etiqueta. Hay más cosas como describir un objetivo concreto al comienzo pero es algo que voy a ignorar porque tengo tanto código que iniciar y completar que prefiero centrarme en la obligación de código.
    • 100DaysOfHomeLab: esto es igual que el anterior pero centrándose en lo que se llama laboratorio (informático) casero y todo lo que está relacionado con ello: hardware, software. Bien en la implementación en las pruebas y en el estudio. Me gusta porque yo tengo uno -un laboratorio casero- y he desarrollado un montón de carencias en él. Dedicarle una hora al día durante cien días y anunciarlo en una red social es buen estímulo.
    • 100DaysToOffload: consiste en publicar cien entradas en el blog personal en un año. Y marcarlo y anunciarlo en redes sociales, obviamente. Bueno, eso si lo retomo lo tengo chupado. Pero obligarme de alguna manera no está mal.

No tengo idea de si voy a conseguirlo o no. Sólo sé que me hace mucha falta. Porque me dará la estructura que necesito para vivir.

Iremos contandoo por aquí pero de momento el primero: #100DaystoOffload. :-)